En el marco del Mes de la Salud Mental, los barrios Nariño y Santa Inés se unieron para celebrar un encuentro que trasciende lo simbólico: la clausura de la primera fase del Centro de Escucha, un espacio donde sanar se convirtió en un acto de amor colectivo.

A este emotivo evento se unieron las mujeres del grupo de ayuda mutua de Betania, quienes compartieron sus experiencias y fortaleza, recordándonos que la salud mental también se construye desde la empatía, la palabra y el acompañamiento.

Desde la Secretaría Local de Salud, y el Plan de Intervencones Colectivas, través del Plan de Rehabilitación Comunitaria, los circuitos emocionales y los Centros de Escucha, se sembraron lazos de confianza, espacios de escucha y comunidades que hoy florecen con más fuerza.

Como lo expresó Carolina, una de las participantes:

“Sanar no siempre es del cuerpo; sanar también es soltar el miedo, el enojo, y volver a creer. Hoy no soy la misma, soy otra.”

Cada palabra, cada abrazo y cada encuentro nos recuerdan que la salud mental se teje en comunidad, con respeto, cuidado y esperanza.

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